Lee Ramona la chinche

Leí el libro de Ramona la chinche (o "Ramona the pest"), cuando tenía 12 ó 13 años. En el lugar de trabajo de mi mamá revendían libros donados desde Estados Unidos para recaudar fondos -desconozco por qué no donaban los libros a los niños, pero bueno-, y ella aprovechaba a comprar para nosotras. Aunque ya pasaba de la edad, me encantaban, y este en particular porque pensaba que mi propia hermana también era una chinche como Ramona Quimby.



Siempre he admirado la cantidad de autores de libros infantiles que hay en la lengua inglesa (ojo, he dicho cantidad, no calidad), que escriben libros pensados para niños. ¿Qué pasa por la mente de una niña de 7 años? ¿Cómo es su mundo? Entender esto es la única manera de lograr que un niño empiece a leer desde los 6 o 7 años. Eso, sumado al diseño de los propios libros, haciéndolos interesantes mediante ilustraciones y una portada colorida.

Y es cierto que en español tenemos las colecciones de "El Barco de Vapor" y la "Torre de Papel", pero creciendo nunca me encontré con uno que siguiera esa lógica de los gringos como el Dr. Seuss o incluso el galés Roald Dahl, que a nuestros niños les llegan como grandes producciones de Hollywood, matándoles, me atrevería a decir, toda chispa de imaginación que solo la literatura puede encender.

Creo que inclusive parte del éxito de estos libros es que los convierten en series completas, entonces el niño o niña se mantiene siempre leyendo... fórmula que siguen incluso los libros dirigidos a tweens y adolescentes (a mí me gustaban las "Sweet Valley Twins" y las del "Babysitter's Club", quizá porque con esos libros aprendí inglés). ¿Acaso no puso Harry Potter a leer a millones de niños durante 7 exteeensos volúmenes?

El libro de la Ramona anda por ahí. No he querido desprenderme de él, esperando que algún día tenga una hija con quien compartir esos "tesoritos" de una infancia que nunca conoció un Nintendo. 
 
Una recomendación más actual para poner a los niños a leer (o al menos a ver películas más "sanas") sería los 5 tomos de The Diary of a Wimpy Kid.

Por si te lo preguntas, toda esta nostalgia me vino de ver la película "Ramona and Beezus", con mi hermana, la chinche de 20 años.

Comentarios

  1. Si de por sí la literatura ya se ve de menos, la literatura infantil se lleva lo peor, precisamente porque es para niños (algo así como "meh, cualquiera les cuenta una historia e igual se asombran"). Es un juicio muy injusto, por no decir errado. Basta darse una vuelta por esas secciones en las librerías para ver que hay escritos brillantes, y que con un poco de humildad, hasta los adultos los disfrutaríamos y aprenderíamos algo de ellos.

    Saludos, chera.

    ResponderEliminar
  2. Mario, pero seguramente cuando eras niño leíste algún libro similar, ¿o no?

    Ligia, es totalmente cierto. Los niños son una demográfica a la que nadie le da su debido respeto y lugar. Los queremos poner a leer libros de adultos adaptados para niños, a escuchar música de adultos adaptada para niños (aunque en la actualidad no sé qué califica como música infantil), o a ver películas con narrativas y estéticas que también están pensadas para un mercado meta adulto. Al final pareciera que lo que le estamos haciendo a la infancia es darle fast forward y así tenemos niñas de 10 años que ya actúan como preadolescentes. Respecto a lo otro, muchos adultos aprenderían de las lecciones de vida que traen este tipo de libros... si dejaran de darse tanta importancia y se "rebajaran" a leer un libro infantil (no sé por qué el término 'infantil' se usa tan peyorativo en ocasiones). Saludos hasta el sur del sur.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Gracias por leer. Y por comentar. Y por existir. A veces es bonito simplemente escuchar un "Gracias".

Entradas populares de este blog

10 canciones de Pablo Alborán para cada necesidad

10 amigos explicados con personajes de Disney

Barbie girl