Posts que alguna vez tuve la intención de escribir
Cada vez escribo menos. ¿Se habrá dado cuenta? Supongo que tendría que leer para darse cuenta de que no escribo. Hubo un tiempo en que escribía todo lo que se me ocurría. Creo que la diferencia es que antes se me ocurrían más cosas. Yo lo llamo "síndrome del bloguero primerizo", cuando uno empieza por escribir todos los días y al final del año tiene un récord de tres cifras de entradas publicadas. Y sí, en esa etapa uno se obsesiona por cuántos hits y comentarios tuvo, si los retuiteaban o compartían en Facebook. Cositas. Yo solía apuntar ideas por todas partes -repito, porque las tenía-, y hacía una lista a manera de stock de qué entradas podía escribir más adelante. Así como de buenas intenciones está empedrado el camino al infierno, mi cuaderno está lleno de entradas que nunca llegue a escribir. Solo tengo los títulos. De cómo las fantasías animadas de ayer y hoy están llenas de violencia. ¿Nunca se ha puesto a pensar que el Coyote bien podría aparecer en un episodio