Ocurrente Irreverente

A veces me pregunto adonde me fui. ¿Qué fue de todas las cosas que me gustaba hacer? ¿De las que quería hacer? ¿Lo que quería ser? ¿Lo que quiero ser? Me perdí en el camino, ¿pero me puedo reencontrar? Cuando te buscas a ti misma, ¿qué esperas encontrar? ¿Y qué pasa cuando lo que encuentras no era lo que querías? Quizá nunca me gustó, nunca quise, nunca fui.

Hasta hace unos años -2008 para ser exacta-, solo existía un Justin. No cantaba "Baby, baby, baby, oh", no decía "Never say never", y ciertamente no tenía ese corte de pelo. Si bien no fui fan de 'NSync (Team Backstreet Boys!), recuerdo un par de canciones que en su época, hace 12 años, arrancaban suspiros entre mis compañeras quinceañeras. ' Gone ' es preciosa. Ahí conocimos a EL Justin. Timberlake pues. Después 'NSync dejó de hacer música y él se lanzó como solista. El primer disco fue aceptable. Todavía canto el coro de 'Señorita' de memoria. Guys sing: It feels like something's heating up, can I leave with you? And ladies: I don't know but I'm thinking 'bout really leaving with you... Entonces llegó FutureSex/LoveSounds y ahí sí estalló. No me canso de escuchar ese disco. Si las máquinas del tiempo existieran, pediría transportarme al concierto del Madison Square Garden, que vi tantas veces por HBO.

¿Se acuerda de estos? Pasa que tuve guardadas las fotos de mi graduación por más de tres años porque nunca tuve la iniciativa de buscar un álbum. Creo que lo más seguro es que ni siquiera tendría fotos impresas de no haber sido porque las tomó un fotógrafo de esos que asisten a los actos de las universidades y luego te vende el paquete. Determinada a que ya no estuvieran en el fondo del cajón, me di a la tarea de comprar un álbum. ¿Se acuerda de esos? Pues resulta que están en peligro de extinción. De los cuatro lugares a los que fui, antes de ir a parar a Sanborns, en tres aún tenían álbumes, pero de los de bolsita para fotos 4x6. Aquellos anticuados  que traen páginas adhesivas son una reliquia. Por suerte, en la cadena mexicana de los buhos tenían suficientes tipos de álbumes para escoger y pude terminar lo que me había propuesto -para mucho agrado de mi mamá, quien por años se encargó de documentar nuestras vidas. Lo más conveniente sería comprar uno de esos mar

Alguien que le diga que él era mi amor platónico, por si nunca se dio cuenta. Alguien que le diga que a los 16 años, en aquella banca, yo supe que él era especial e iba a llegar lejos. Alguien que le diga que a los 26, sé que tenía razón. Es especial y está lejos. Alguien que me diga que él siempre estuvo lejos. Alguien que le diga que para mí él (era) es el epítome de perfecto. Alguien que le diga que él era todo lo que yo quería (quiero) en una persona. Alguien que le diga que le agradezco haberme dado la ilusión más pura, sin saberlo. Alguien que me diga que a esta edad aún quedan amores platónicos, hombres "perfectos", ilusiones puras. En algún lugar de este mundo. Algún día.